Os aseguro que esta entrada no va a ser larga pero es que quería compartirlo.
He llegado a casa hace 15 minutos y me he llevado una sorpresa: mis host parents están aquí con el bebé. Ahora estoy en mi habitación y le estoy oyendo llorar. Así que hoy va a ser el primer día de nuestra nueva vida, con una nueva vida. Creo que voy a tener suerte, la puerta no está cerrada del todo y no se oye demasiado pero bueno, ya os diré más adelante.
Ahora voy a estar un rato en casa porque dentro de 40 minutos tengo que irme. Tengo babysitting en otra casa, esta vez gratis. En realidad es un favor que le hago a una au pair que conozco. A ella le ha salido un trabajo que no puede rechazar justo para esta noche. Al principio me quería pagar de su sueldo pero le dije que no, que era un favor aunque ella se sentía mal si yo lo hacía gratis así que hemos llegado a un acuerdo: le dije que me invitara un día a merendar o algo así. Creo que entre au pairs nos tenemos que ayudar y además los niños estarán durmiendo así que solo tengo que hacer acto de presencia.
Después de esta noche os diré si el bebé es llorón o no pero vamos, con el sueño profundo que tengo yo no creo que me entere.
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